La ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires encabezó la semana pasada en la Usina del Arte una reunión de gabinete ampliado con el personal de la cartera educativa porteña. El objetivo del encuentro fue tener un espacio con el equipo del Ministerio para conversar sobre la coyuntura actual y escuchar las consultas y sugerencias de las personas que trabajan todos los días para mejorar la educación en la Ciudad.
La titular de la cartera educativa porteña destacó la importancia de trabajar juntos como equipo y enfatizó que “ninguno de nosotros es más importante que todos nosotros juntos. Eso es así desde que nacimos como espacio político, como equipo primero y como partido después, y es algo que nos diferencia del resto de las fuerzas políticas”. Además, elogió a su equipo por su trabajo en los últimos meses, especialmente durante su licencia de maternidad, y les agradeció por estar siempre presentes.
Durante su discurso, Soledad Acuña habló sobre la importancia de escuchar a la gente y trabajar en equipo para implementar políticas efectivas que satisfagan las necesidades de la comunidad: “todo lo que logramos es, sin lugar a dudas, como equipo. No hay otra manera, yo no la concibo, ni ninguno de los que estamos acá, pensamos que algo de todo lo que hicimos podríamos haberlo hecho solos”.
La ministra habló sobre algunas de las discusiones profundas que su equipo tuvo para transformar la educación de la Ciudad de Buenos Aires, incluyendo la creación de la Universidad de la Ciudad y la reforma del Estatuto del Docente. También recordó que establecieron las condiciones para ser alumno regular y las consecuencias si se perdía la regularidad: “porque cada día cuenta y el tiempo que se pierde se tiene que recuperar”.
La ministra de Educación también mencionó cómo juntos lograron abrir las escuelas en pandemia en todo el país, cuando el Gobierno nacional intentó cerrarlas. Enfatizó que defendieron la libertad y siempre mantuvieron a las personas en el centro de su enfoque. Recordó que algunos la llamaron asesina por esta decisión. Además, mientras otras fuerzas políticas defendían la promoción automática de los estudiantes, desde el Ministerio se opusieron rotundamente a esta medida y afirmaron que era una estafa para los chicos y para las familias.
“Estoy orgullosa, agradecida y feliz de lo que logramos, especialmente de lo que logramos cuando las cosas no eran fáciles, y quiero que ustedes también lo estén, porque este equipo hizo realidad la idea de vincular la escuela con el trabajo. Fue una batalla que dimos juntos, y digo batalla porque hubo muchos que pensaban -y siguen pensando- que en la vida hay atajos, que las cosas te las regalan, que el esfuerzo no vale, que no creen que el trabajo es el mejor camino hacia el progreso”, expresó la ministra.
Sobre la candidatura
La ministra de Educación porteña habló con su equipo sobre su candidatura: “En noviembre del año pasado, en un Gabinete Ampliado también, les conté que era candidata a Jefa de Gobierno y que, aunque para mí en lo personal era un enorme desafío porque ponía todo patas para arriba, era, también, una decisión de equipo. Como equipo podíamos seguir haciendo y transformando la Ciudad, con los valores que nos guían desde siempre”.
“En ese momento les dije que mi decisión tenía muchos “para que”: Para que el PRO tuviera las mejores opciones para competir en las elecciones; para que Horacio sea presidente y tenga a su equipo acompañando desde todos los lugares que hagan falta; para que las mujeres tengamos oportunidades de ocupar lugares de poder, con poder; para que la política siga siendo una forma eficaz y genuina de transformar la realidad; para seguir trabajando por una Ciudad y una Argentina donde mis hijos y todos los jóvenes elijan quedarse y puedan progresar”, continuó Soledad Acuña.
Y agregó: “Esos para que de la decisión que tomo hoy, de no competir en las PASO, son exactamente los mismos que les conté hace unos meses. Lo único que cambia es el contexto: hoy, más que nunca, los argentinos nos necesitan unidos. Hoy, más que nunca, tenemos que demostrar que somos distintos. Más que nunca tenemos que darles a los argentinos algo que haga que no pierdan la poca esperanza que les queda. Y ese algo, es unión y coherencia”.
“Espero que mi candidatura haya sido un mensaje para las mujeres. Y les hablo ahora a las mujeres del equipo: nosotras podemos. Ser mujer no nos hace ni menos candidata, ni menos ministra, ni menos subsecretaria, directora o gerente. Tenemos que animarnos a ocupar lugares. No fue fácil, no es fácil, pero la respuesta es juntas. Abriendo camino a otras, acompañando, escuchando, impulsando. Sigo pensando y sintiendo, como dije en noviembre del año pasado, que la política es la forma más eficaz y genuina de transformar la realidad y por eso voy a seguir trabajando por una Ciudad y un país donde cada argentino, chico o grande, encuentre las oportunidades que necesita para vivir bien, desarrollarse y ser feliz”, concluyó la ministra.