La ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, participó esta semana de la creación del Foro Argentino Contra el Antisemitismo (FACA). En un contexto de creciente tensión mundial debido al conflicto desencadenado en Israel a raíz del ataque del 7 de octubre por parte de la agrupación terrorista islámica Hamás, un variado grupo de figuras compuesto por intelectuales, académicos, políticos, periodistas, empresarios, líderes de opinión, artistas y miembros de la sociedad civil, se unen para promover un llamado a la acción contra el antisemitismo, tanto en Argentina como en todo el mundo.
Cincuenta prominentes personalidades se unieron para subscribir el comunicado inaugural del Foro Argentino contra el Antisemitismo (FACA). Esta declaración fue emitida el martes 7 de noviembre, conmemorando un mes del acto terrorista que lamentablemente ha cobrado la vida de más de 1400 ciudadanos israelíes.
Los suscriptores de este comunicado incluyen a destacados intelectuales, académicos, políticos, periodistas, líderes de opinión, empresarios, artistas y miembros de la sociedad civil. En su declaración, recordaron la brutalidad a la que fue sometida la población civil en el sur de Israel, actos que se caracterizaron por una inhumanidad que evoca recuerdos de los pogromos y de épocas de antisemitismo virulento.
En el comunicado, los firmantes afirman: “No se había asesinado a tantos judíos en un solo día desde el Holocausto. Hay familias destruidas, ancianos asesinados en sus hogares y en las calles, madres a las que les arrebataron a sus hijos de sus brazos, bebés degollados, y padres que presenciaron las peores atrocidades cometidas hacia sus hijas y esposas. Cientos de personas, incluyendo niños y bebés, 22 de ellos argentinos, siguen secuestrados por Hamas. Todos son víctimas simplemente por ser judíos”.
El comunicado fundacional del Foro Argentino Contra el Antisemitismo (FACA) lleva las firmas de personajes de la política, la cultura, el periodismo e intelectuales, entre quienes aparecen Pablo Winokur, Mariana Stilman, Claudio Zuchovicki, Diana Wang, Elisa Trotta Gamus, Jorge Sigal, Ioni Shalom, Julián Schvindlerman, Alejo Schapire, Héctor Schamis, Daniel Sabsay, Ana Clara Romero, Fabio Quetlags, Alejandro Pitashny, Diego Papic, Agustina Ossona, Jorge Ossona, Luis Novaresio, Pablo Novak, Juan Morris, Romina Manguel, Pamela Malewicz, Ricardo López Göttig, Alfredo Leuco, Daniel Lerer, Mirta Kupferminc, Santiago Kovadloff, Tamara Kosacoff, Willy Kohan, Gonzalo Garcés, Alejandro Finocchiaro, Maximiliano Ferraro, Bernardo Erlich, Carolina Di Tella, Cecilia Denot, Diana Cohen Agrest, Maurano Caucino, Alejandro Borensztein, Paula Bertol, Osvaldo Bazán, Karina Banfi, Claudio Avruj, Federico Andahazi, Laura Alonso, Sabrina Ajmechet, Soledad Acuña, y Sabrina Ajmechet.
EL HOLOCAUSTO
El Holocausto, también conocido como el Shoá en hebreo, fue el genocidio sistemático y el asesinato en masa de aproximadamente seis millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial. Fue perpetrado por el régimen nazi de Adolf Hitler y sus colaboradores entre los años 1941 y 1945. Este evento representa uno de los capítulos más oscuros y trágicos de la historia del siglo XX.
El Holocausto tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), cuando la Alemania nazi liderada por Hitler ocupó vastas áreas de Europa. Los nazis promovían una ideología antisemita y buscaban eliminar a los judíos y otras minorías étnicas y políticas. Antes del asesinato en masa, los judíos fueron sometidos a una brutal persecución que incluyó despojo de propiedades, discriminación, leyes de Núremberg que limitaban sus derechos, y deportaciones a campos de concentración y guetos.
Los nazis establecieron campos de concentración y campos de exterminio en toda Europa ocupada. Los campos de concentración como Auschwitz, Buchenwald y Dachau fueron lugares donde los prisioneros eran forzados a trabajar en condiciones inhumanas, y muchos murieron debido a la brutalidad y la enfermedad. Los campos de exterminio, como Auschwitz-Birkenau, eran centros de asesinato en masa, donde las víctimas eran asesinadas en cámaras de gas. Además, los nazis realizaron experimentos médicos inhumanos en prisioneros, lo que causó un sufrimiento innecesario y la muerte de muchas personas.
Los campos de concentración y exterminio fueron liberados por las fuerzas aliadas a medida que avanzaban en Europa. Tras la guerra, se llevaron a cabo los Juicios de Núremberg, en los cuales líderes nazis fueron juzgados y condenados por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Aunque los principales objetivos del Holocausto fueron los judíos, otras minorías también fueron perseguidas y asesinadas, incluyendo gitanos, personas con discapacidades, comunistas y opositores políticos. El Holocausto dejó una cicatriz indeleble en la conciencia mundial y tuvo un impacto duradero en la comunidad judía y en la humanidad en general. Se convirtió en un símbolo de la barbarie humana y el racismo extremo.
El Holocausto se conmemora en todo el mundo en el Día Internacional de Conmemoración del Holocausto, el 27 de enero, que marca la liberación del campo de concentración de Auschwitz por las fuerzas soviéticas en 1945. La enseñanza y la preservación de la memoria del Holocausto son fundamentales para prevenir futuros genocidios y crímenes contra la humanidad. Se promueve la educación sobre el Holocausto en escuelas y universidades en todo el mundo. El Holocausto es un recordatorio sombrío de la capacidad de la humanidad para cometer atrocidades inimaginables. Su estudio y conmemoración son esenciales para asegurarse de que la historia no se repita y para honrar la memoria de las víctimas.